domingo, 23 de mayo de 2010

Noticias Locales


Elfego Melgar al frente de Jerez

Don Elfego Melgar nació en la aldea La Esmeralda, en el municipio de Jerez el día 14 de septiembre de 1946, de cuna humilde, tuvo una niñez llena de necesidades, pero feliz pese a todo. El recuerdo de pobreza que siempre le acompañó fue como un timbre que siempre le recordó su origen y que le impidió llenarse de orgullo. Sus padres fueron Concepción Valenzuela y Félix Melgar.

A la de dieciocho años, tras haber fallecido su padre, emigró de Jerez con destino a la ciudad capital, a trabajar para contribuir en los gastos de la familia, llevaba consigo un sexto grado de primaria obtenido con mucho sacrificio. En la capital emprendería una lucha por forjarse un futuro fructuoso, se graduó de Perito Agrónomo, en la escuela nacional de Agricultura, lo que le permitió, mas tarde especializarse en Sistemas de Riego en universidades extranjeras. Contrajo matrimonio con doña Gloria Muñoz, con quien procreó cinco hijos: Elfego, Maribel, Conchita, Nicté y María del Carmen.

Su formación y su especial conocimiento de la realidad, acompañada de un sentido común especial, le llevaron a desempeñar el cargo de Catedrático y luego Director de la Escuela Nacional de Agricultura, cargo que luego abandonó para trabajar en compañías israelitas, donde se especializó en sistemas de riego. Esto le permitió viajar por muchos países del mundo, de donde acarreó buenas ideas con la intención de mas tarde desarrollarlas en su pueblo Jerez.

A los cincuenta y dos años de edad, regresó a Esmeralda con la intención de descansar y disfrutar de la vida rural. El pueblo jerezano atravesaba una profunda crisis en su desarrollo, las anteriores administraciones habían decepcionado y había una apatía generalizada hacía todo lo político. Fue entonces cuando un grupo de vecinos concienciados decide ponerlo al frente de su movimiento, naciendo así el Comité Cívico Jerezano (COCIJER) con el cual se ganaron las primeras elecciones por un margen escasísimo.

Estuvo al frente de la administración municipal durante dos periodos consecutivos, del 2000 al 2008, ocho años que marcaron historia en el pueblo, y a los que se les podría llamar el Renacimiento de Jerez, ocho años de desarrollo plasmado no solo en obras de infraestructura, sino también en proyectos de inversión social.

El pueblo experimentó cambios significativos, extraordinarios, tanto así que personas que habían vivido fuera del pueblo, al momento de volver les parecía estar llegando a otro lugar. A continuación presentamos un breve resumen de las principales obras que Elfego Melgar y su corporación realizaron en el pueblo.

Implantación de la carrera de Bachiller en Computación con Orientación Comercial y creación del Instituto Municipal de Educación Media Básica con servicio totalmente gratuito incluyendo colegiatura, uniforme diario, uniforme de deporte, uniforme de Práctica Supervisada.

Construcción del edificio del Instituto Municipal de Educación Media, con materiales de primera calidad, con dos módulos docentes de cuatro aulas y servicios sanitarios cada uno, equipado con laboratorio de computación y de inglés, salón de biblioteca comunitaria, oficinas administrativas para dos secretarías y dos direcciones, un auditorio, área verde, área deportiva (que inconclusa, pues su intención era ponerle techo con doble funcionalidad, jugar con o sin lluvia y ocuparlo como salón gigante de usos múltiples). Nunca permitió que dentro del edificio hubiera casetas, porque su intención era construir una cafetería formal que tuviera similitud con el resto de la construcción.

En educación invirtió en la implantación de la Academia de Mecanografía totalmente gratuita, en becas de estudio a estudiantes universitarios y a estudiantes de carrera por madurez, becas para niños de escasos recursos, excursiones con fines didácticos. Se construyeron además varias escuelas (no de block y lámina) sino de ladrillo, terraza, piso cerámico, puertas y ventanas de cedro.

Durante estos años se implementó la atención psicológica para estudiantes de diversos centros educativos y el tratamiento odontológico para estudiantes de bachillerato.

Compra y circulación de los campos de fútbol de Escarbaderos y Esmeralda. Es justo decir que este aporte tuvo mejor acogida en Escarbaderos, donde la población dando un verdadero ejemplo de trabajo comunitario realizó por su propia cuenta todo el trabajo de engramillado.

Implantación de sistemas de agua y saneamiento. Tras varios años de trabajo y de malgastar dinero, por fin los vecinos de Esmeralda dispusieron de un servicio de agua y drenaje que funcionara, para esto fue necesaria la introducción de la energía trifásica desde El Jocotillo, Yupiltepeque con el fin de hacer funcionar las bombas destinadas a distribuir el agua en Esmeralda.

Pavimentación de calles de Jerez y Esmeralda. Esto aparte de cambiarle la cara al pueblo, facilitó mucho el desplazamiento de carros, motos y tuc tucs, ya que anteriormente hasta a pie eran difícil de transitar, especialmente en invierno.

Asfalto de la carretera que comunica Jerez con Atescatempa y Yupiltepeque. Este proyecto que beneficia a varios municipios muy probablemente no se hubiera hecho nunca sin la participación de Elfego Melgar, quien trabajó mucho para la unión de los alcaldes del cono sur del departamento. Para su realización fue necesaria la ampliación de los puentes de Esmeralda y Jerez, así como la instalación de servicios de agua potable y drenajes a lo largo del pueblo.

Compra del terreno para la construcción del edificio del Centro de Salud, el cual ya cuenta con su equipo y mobiliario.

Compra de terreno aledaño a la piscina con miras de, una vez cubiertas las necesidades básicas, mejorar el balneario.

Equipamiento y modernización de las oficinas municipales.

En los terrenos comunales de los Camarones se reforestaron aproximadamente sesenta manzanas con la participación del gobierno y ex patrulleros de Jerez y Yupiltepeque, arbolitos que más tarde fueron quemados por manos criminales.

Mejoramiento de la calle a Casas Viejas como otra vía de acceso a Jerez.

Inicio la construcción del parque de La Esmeralda, obra que lamentablemente no alcanzó a terminar, y que muy probablemente tardemos en ver finalizada.

Una característica especial es que la mayoría de los proyectos se realizaron por Administración Municipal, tomando en cuenta que le eran más baratos y de mejor calidad y de paso le daba trabajo a muchos jerezanos , quienes estaban en planilla con derecho a bono y aguinaldo.

No es posible mencionar todas las obras que durante estos años se realizaron, ocuparía mucho espacio, y además no es necesario ya que estas están al alcance de nuestros ojos. Mas importante es señalar que Elfego Melgar nos devolvió el orgullo de ser jerezanos, adonde estuvo siempre puso en alto el nombre de este pueblo, ya fuera ejerciendo de presidente de la junta de alcaldes del departamento de Jutiapa, o defendiendo en el congreso de la Republica el derecho de los jerezanos a ser participes del presupuesto de la República.

Desde el principio fue reconocido como uno de los mejores alcaldes del país, ya fuera por autoridades gubernamentales o por ciudadanos de a pie que fueron testigos del cambio que experimento el municipio. Su buena fama llega más lejos cuando la opinión la dan profesionales del ámbito de la cooperación al desarrollo que ha trabajado por toda Latinoamérica, ellos consideran que Elfego constituye un verdadero ejemplo de cómo hacer desarrollo.

El día miércoles 21 de abril de este año 2010, a la edad de sesenta y tres años, Elfego ha dejado de estar físicamente entre nosotros, nos ha dejado un pueblo que no imaginábamos y verdadero ejemplo de trabajo, lucha, integridad y honestidad.

Hasta siempre Fito

Morelia Ávila

A Un Amigo que se fue


Poema dedicado a la memoria de nuestro amigo Elfego Melgar Valenzuela




A UN AMIGO QUE SE FUE

El día nacía y el solo quiso abrazarte esa mañana pero llegó tarde al infortunio

Pero los pájaros no callaron su canto y los árboles eran testigos oculares de la revuelta

Te debatías a duelo con la muerte, más esta que es mujer y es celosa se encaprichó con él

Y se lo llevo a dormir junto con ella.

Las palabras volaban por los vientos anunciando tu despedida, más tu cuerpo abra muerto

Más tus ideales siguen retumbando en la conciencia de los que te admiraban

El sol implacable salió de su cuna y alumbraba más fuete que nunca como diciéndote adiós

Una estrella más brillaba en el firmamento, una flor fue arrancada en la tierra.

Dejaste en herencia un verso de Benedetti, tiempo nuevo, el comienzo de algo bueno

Dejaste tus palabras sólidas convertidas en sueños concretos y palpables

Dejaste un puñado de apretones de manos en las manos de los sencillos y humildes.

Somos testigos fieles de tus anhelos y proezas, de tus actos imperfectos pero humanos

De tu lucha ardua y constante para el cambio que se negaba a tener presencia en tu pueblo

Todo se dio en el tiempo y espacio, acondicionado por la buena voluntad de tu corazón.

¿Quién te ha robado el mes de abril?

Estoy seguro que habrá algún lugar del mundo donde pueda abrazar al amigo que se quedo dormido un tiempo atrás.

Por Deivy Manolo Peñate


Comentarios anónimos del pueblo jerezano tras conocer la muerte de Elfego Merlgar

· Don Elfego Melgar Valenzuela, cariñosamente llamado por la mayoría como Don Fito y para otros Fito, dejó en las páginas de la Memoria de Jerez, el ejemplo de cómo administrar los fondos del pueblo, de cómo compartir alegrías y tristeza con la gente humilde; por lo que sus discípulos seguiremos sus pasos y velaremos porque las nuevas autoridades municipales le den prioridad a las necesidades del pueblo antes que a sus propios intereses.

· Pasó perpetuando sus ideas, sus deseos más desinteresados e ideales más elevados a través de obras, que son bellas realidades.

· Al ver sus huellas podemos sentir el amor que tenía, a pesar de todo, por su pueblo, por su gente.

· Todas y todos los que somos conscientes de lo bueno que Don Elfego hizo por nuestro pueblo sentimos en lo más profundo de nuestro ser un gran dolor y un vacío por su ausencia física.

· Es imposible escapar de lo bueno que nos ha dejado. Que bueno que no podemos escapar de él.

· No podemos reponernos de su aparición deslumbrante en nuestras vidas y no podremos jamás. Qué suerte haber conocido a Fito, qué suerte haber compartido con él, qué suerte que fue nuestro alcalde, qué suerte que amó a su pueblo y qué suerte que soy jerezana.

· Recibió ráfagas de odio sin motivo, pero él supo defenderse, como él sabía hacerlo: con ráfagas de amor. Y nos dio miedo, pensamos que algo se traía entre manos, eso era demasiado. Fito fue como una explosión de amor en Jerez. Algunas y algunos lo podemos percibir.

· La gente que dice “pobrecito Fito” está equivocada. pobrecit@s nosotr@s que no quedamos sin él.

· Admiré, entre muchas otras cosas, la pasividad y el respeto que caracterizaron a Fito.

· Fito no nos enseñó a pelear con fuerza; nos enseñó a luchar con y por la paz a través del amor y la educación.

· Acertó indiscutiblemente, como en otras áreas, apostando por la educación.

.

Opinión

Editorial

La aparición de Elfego Melgar en el escenario político del municipio de Jerez, fue cuando menos rara. En aquellos tiempos, no consta que ahora no, la costumbre era comprar los votos con botellas de guaro y no había propuesta que interesara mas a los jóvenes (varones) que la promesa de apoyar el futbol, la secretaría y tesorería se prometían a varias personas.

Él era un hombre honesto, no prometía lo que no podía cumplir y siempre prefirió la palabra a la hora de convencer a la gente. Así fue como gastándose una cantidad mínima de dinero, reunida por los miembros del comité cívico jerezano, ganó la alcaldía por un margen de tres votos. Suficiente para soñar.

Al poco tiempo nos despertaba con nuestros sueños ya convertidos en realidad, y nos invitaba a soñar de nuevo. Su principal preocupación era que los niños y niñas del pueblo tuvieran salud y educación. Para procurar la salud, las inversiones en infraestructura iban orientadas a garantizar el agua potable, los sistemas de saneamiento y puestos de salud, y por el lado de la educación se construyeron varias escuelas, incluido el instituto de educación básica y bachillerato, además se dotó de beca a prácticamente todo el que quisiera estudiar, sin importar sexo, edad o procedencia.

Toda esta inversión en obra pública tuvo una importante repercusión en la economía local, ya que la municipalidad dejó de contratar empresas constructoras, que se quedaban con gran parte del presupuesto destinado a la obra, y pasó a administrar ella misma el desarrollo de los proyectos, esto posibilitó que mucha gente tuviera trabajo durante la mayor parte del año, lo que a su vez contribuyó a dinamizar la economía del pueblo, beneficiando indirectamente hasta la más humilde de las tiendecitas del municipio.

De más está decir que el municipio entero fue transformado durante los ocho años de buen gobierno de Elfego Melgar y su corporación municipal. Es por eso que cuesta tanto entender por qué durante este tiempo pasó de ser un ciudadano casi anónimo a convertirse en la persona más odiada de la historia del pueblo, sobre todo porque Fito cosechó amor en todos los sitios por donde pasó. Innumerables fueron los ataques que sufrió, y más de una vez lo intentaron sacar del poder, por las buenas y por las malas también. Nunca sucedió, pero tristemente el proyecto político que él lideraba fracasó en las pasadas elecciones, está vez el pueblo optó por una propuesta que a fuerza de ser sinceros todavía no sabemos cuál es.

Muchos cuetes se tiraron y mucha gente se emborrachó el día que la municipalidad fue ocupada por sus actuales inquilinos. Ahora parece que ya no se celebra tanto, o celebran solo unos pocos. De cualquier manera lo que está claro es que hemos parado el tren del desarrollo, que nos hemos estancado y que ahora parece que vamos hacia atrás.

Los logros más grandes de este periodo aún están por conocerse, pero sin duda el más importante es haber recuperado la confianza, el saber que los sueños se pueden hacer realidad. Esto para nada quiere decir que las cosas no se puedan mejorar, todo, todo se puede hacer de una mejor manera, y ese será el deber quienes aun seguimos aquí. Ya tenemos agua potable, pues ahora nos toca a nosotros impedir que se sequen los ríos y los pozos, ya tenemos educación, ahora es nuestro deber velar que esta sea de calidad y que contribuya al desarrollo del pueblo y no a la fuga de cerebros. Recordemos que el modelo de desarrollo que se implemento durante los últimos años estaba basado en la construcción y esto no dura para siempre, será necesario encontrar un modelo de desarrollo que no se caiga con el tiempo.

La Redacción

Opinión

Money, Money

Lo que coloca a seres humanos después de los cerdos en la prioridad de elección de alimentos es el hecho de no tener dinero ni dueño. Jorge Furtado, Video documental ‘La Isla de las Flores’.

Dicen los estudiosos del origen de la humanidad, que desde que existimos como tal, hay dos cosas que han sido muy importantes para nuestra supervivencia y dominio sobre las demás especies: el cerebro desarrollado y el pulgar oponible que nos permite manipular diversas herramientas.

Desde que nos bajamos de los árboles, utilizando nuestra cabeza y nuestras manos, hemos creado una cantidad increíble de herramientas, para construir y para destruir. Lamentablemente hemos tenido más éxito en las segundas, y hoy día tenemos arsenal para destruir seis veces el planeta.

En un principio las herramientas estaban destinadas a facilitarnos la vida, comenzamos utilizándolas para procurarnos la comida, para construir casas, para elaborar vestimentas que abrigaran… luego, y a medida que las sociedades crecieron, la gente se fue especializando en un solo trabajo. Además de agricultores y ganaderos, aparecieron albañiles, carpinteros, sastres… y como ya no todos producían de todo lo que era necesario para vivir, surgió el intercambio, de los productos del trabajo y del trabajo mismo, o sea, de bienes y servicios, como dicen los economistas.

Pero imaginemos lo complicado que pudo haber sido para un agricultor pagar los servicios de un sastre, pagando con dos arrobas de maíz, dos manos de aguacates, una botella de leche, tres ayotes… Para facilitar estos intercambios hubo que crear un nuevo instrumento; así apareció el dinero.

Para que se produjera el comercio entre el agricultor y el sastre, el agricultor antes debía haber utilizado su azadón y su chuzo para labrar la tierra, y cosechar los productos cuya venta le proporcionaría el dinero necesario para comprar la ropa que el sastre habría confeccionado con la ayuda de sus tijeras y agujas. Y es que nadie nunca ha podido cultivar un huerto o confeccionar una mudada de ropa con un simple manojo de billetes.

Esto parece haberse olvidado, porque en los tiempos que corren se ha dejado de reconocer el trabajo de la gente y se valora mejor a quien más dinero tiene, sin importar como lo ha conseguido. Ya nadie admira el trabajo de un buen albañil, un buen herrero, o una buena costurera.

Al igual que el resto de herramientas que utilizamos, el dinero puede ser muy peligroso, y a veces resulta más efectivo que un machete a la hora de matar gente. Un ejemplo de ello es el hambre que se produce debido a la especulación con la comida: campesinos pobres y endeudados venden barato al momento de cosechar, mientras grandes inversores compran y embodegan, provocando una falsa escasez que eleva los precios. Los campesinos guardan lo que se van a comer, pero si surge una enfermedad o cualquier contratiempo deberán vender algo más, y desajustar así la comida para el año. Esto los obliga a buscar trabajo para volver a abastecerse, pero aunque lo consiguieran, ahora tendrán que conseguir más dinero ya que los especuladores han multiplicado los precios. En el mundo entero una de cada siete personas no tiene que comer, pero comida hay para alimentar al doble de la población mundial, es la existencia del dinero lo que separa al hambriento de su alimento.

Estos y otros efectos dañinos del dinero son conocidos desde hace ya mucho tiempo, y fue por eso que en su momento la iglesia católica prohibió el lucro a sus fieles, y por eso mismo después de la gran depresión de 1929, los estados decidieron poner límites al libre movimiento de dinero. Pero lo memoria se pierde con mucha facilidad, y las escuelas no ayudan a recordar lo que hay que recordar, y ahora estamos otra vez en las mismas, otra crisis causada por la economía de casino y la libertad excesiva del dinero. Libertad que nunca hemos tenido los seres humanos, dice un inmigrante.

El farol del ciego

¿Qué crisis importa, impacta, e involucra más?

Existe una definición que llama mucho la atención sobre cómo definir la palabra “crisis” la cual nos dice: “Cambio brusco en el curso de una enfermedad, ya sea para mejorar, ó para agravar al paciente”. Y bien podemos seguir este contexto para entender lo que significa realmente una Crisis Económica. Al igual que los órganos componen nuestro cuerpo, diferentes entes o agrupaciones componen una sociedad; trabajadores, obreros, agricultores, empresarios, gobierno, y el resto del mundo (conocido como sector externo).

La crisis financiera que inició en Estados Unidos de América surgió precisamente en ese sector, el sector financiero que más tarde se trasladó a los demás sectores que componen la economía; y debido a la relación que muchos países poseen con Estados Unidos, se transfirió al resto del mundo, golpeando duramente el comercio internacional, y para el caso de Latinoamérica una disminución en las exportaciones, dificultad para financiar el comercio, para adquirir prestamos, reducción en remesas familiares y la difícil situación política de Honduras.

Pero, en realidad el mundo siempre ha vivido crisis económicas, y estas han tenido siempre el comportamiento de un ciclo; países, y el mundo entero entran en crisis, luego se recuperan, llegan a un punto de bienestar máximo y luego caen repentinamente, como si un ser humano naciera, creciera, fuese adolecente, adulto, envejeciese, muriese, y luego volviese a nacer.

Y todas y cada una de las crisis que la humanidad ha enfrentado se han debido básicamente a una razón: al comportamiento avaro e insatisfecho del hombre, que sobre el mismo hombre y sin importarle lo demás, quiere lograr acumular la mayor cantidad de riqueza, sin importar los daños que pueda causar al resto de seres humanos, y más importante aún a la naturaleza. Pero ¿acaso perdió el ser humano de la capacidad de identificar el problema?, ¿o es que han destruido todos los libros que nos indicaban la raíz del mismo?, ¿se nos cuenta la verdad a medias, o nula?, o ¿habremos perdido ya la sensibilidad a tal punto de no interesarnos los problemas ajenos?

Y es que en realidad las crisis económicas que el mundo ha sufrido se reflejan y se tratan de corregir principalmente por que afectan el bienestar de la clase alta, de los ricos, las empresas mundiales y la elite económica en general. Y algo que duele aceptar es que el mundo realmente siempre ha vivido en crisis, bastaría dar un paseo por los barrios pobres de cada país, de cada cuidad, de cada aldea y cantón y darnos cuenta que en realidad la crisis económica es al parecer una palabra que se utiliza siempre y cuando no afecte a los pobres, los que carecen de una vida digna. Parece que las crisis solo afectan a los grandes, sin embargo la crisis es crónica.

Y es que al ver la crisis económica desde la cima de una montaña podemos percatarnos del no tan enorme daño que en realidad representa para la humanidad. Existe una crisis que venimos forjando desde el inicio de la era industrial, una madre crisis que será capaz de alcanzar hasta el más pequeño ser del planeta, y es la crisis ambiental.

Si bien la economía se encarga del estudio de los métodos más eficaces para satisfacer las necesidades humanas materiales mediante el empleo de recursos escasos de una manera eficiente (entiéndase: administrar bien lo poco que tenemos). Parecemos haber pocos interesados en cumplir con lo que economía conlleva, pocos interesados en buscar alternativas, soluciones, o como minimizar el problema, el daño que el planeta obtiene a causa de nuestro desinterés, de la producción masiva de artículos innecesarios y en el modo de producirlos.

El mundo empieza ya a manifestar señales de la grave enfermedad llamada “contaminación” de la que padece; alteraciones en diversos

ecosistemas, el calentamiento global, la contaminación de ríos, lagos, mares, océanos, el deterioro de las fuentes de agua potable, escasez de alimentos debido a alteraciones en el clima. La crisis al parecer ya empezó y solo tendrá un ciclo; difícilmente pueda renacer.

Existe actualmente un derrame de petróleo en las costas de Estados Unidos y el golfo de México, y se calcula que será varias veces mayor al derrame ocurrido en Alaska en el que el petrolero Exxon Valdez en 1989. Dicho derrame tiene aproximadamente 5,537 kilómetros cuadrados de extensión que equivale al 5.08% del territorio Nacional, y 1.72 veces mayor a todo el departamento de Jutiapa (casi dos veces mayor).

Las externalidades negativas (daños ocasionados por la actividad productiva del hombre al medioambiente y a la sociedad) son escasamente controladas. Las diversas reuniones mundiales para contrarrestar el calentamiento mundial no son apoyadas por los países que más contaminan: Estados Unidos, México, China, Japón, Alemania entre otros. (Las reuniones mundiales que trataron temas medioambientales fueron: Conferencia de Estocolmo 1972, Cumbre de Rio 1992, Kioto 1997, Copenhague 2010. Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente PNUMA). La televisión y los diferentes medios de comunicación nos hacen creer que debemos consumir los productos que nos presentan para poder ser generalmente catalogados con cierto nivel de vida dentro de la sociedad. Es publicidad que está diseñada a invadir la mente del consumidor, de esta manera se cuenta inclusive con publicidad diseñada para niños y bebes, así cuando crezcan serán clientes potenciales. Y esos productos a la vez pasarán a formar parte esencial del consumo en la vida del individuo sin tan siquiera necesitarlos realmente. (Tomado del libro: “La Corporación”. Noam Chomsky).

El protocolo de Kioto debió ser ratificado por al menos 55 países cuyas emisiones de gases contaminantes a la atmosfera representa el 55% del total, se les pidió reducir la cuota en un escaso 5.2% (Datos a 1992)

Pero aún tenemos el poder de poder cambiar el rumbo, aun tenemos la capacidad de minimizar o mitigar la gran crisis económica que se avecina. Debemos cambiar nuestra actitud, hacer un uso racional de los recursos escasos con que contamos, consumir menos de esas cosas no necesarias, ahorrar electricidad (previniendo así la quema de combustibles fósiles que en nuestro país son utilizados en gran parte en la producción de energía), reciclar, cambiar el método de cosechas actual, diversificar los cultivos, cuidar nuestro ecosistema, cambiar la televisión ociosa por un libro, utilizar menos papel, investigar sobre la actual situación ambiental de nuestra comunidad, de nuestros ríos, nacimientos y aportar soluciones a la problemática. En síntesis buscar un desarrollo sostenible (un desarrollo que satisfaga las necesidades del presente sin poner en peligro la capacidad de las generaciones futuras para atender sus propias necesidades). Allí entonces estaremos economizando y empezaremos a darle al término Economía el significado que realmente merece.

Y es que la Economía abarca un conjunto enorme de cosas por analizar, entender y tratar de proyectar, pero sin duda la mayor importancia debe centrarse en la naturaleza y la manera en como el hombre interactúa con ella, manera que determinará nuestro bienestar y el de las generaciones futuras.

Como ya lo dijo Eduardo Galeano (escritor) en El Derecho a Soñar: “La gente no será manejada por el automóvil, ni será programada por la computadora, ni será comprada por el supermercado, ni será mirada por el televisor; el televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia…”

La investigación debe apropiarse pormenori­zadamente de su objeto, analizar as distintas formas de desarrollo y rastrear su nexo inter­no. Tan solo después de consu­mada esa labor, puede exponer­se adecuada­mente el movimiento real. (Karl Marx. Epílogo a la segunda edición de El Capi­tal)

Mark Peñate Castro

Guatemala abril de 2010